Desde GMS Internacional somos conscientes que estamos viviendo un momento de gran transcendencia a nivel global. Una época de cambio. La crisis de 2008, la crisis de 2010, la crisis del Coronavirus… quizás vengan más. Sin embargo queremos lanzar un mensaje de optimismo a nuestros trabajadores, a nuestros clientes, proveedores, amigos y amigas. Los momentos de cambio son momentos de oportunidades y retos.

En GMS Internacional nos apuntamos a la ola de esas oportunidades y retos aportando nuestro buen hacer desde allí donde trabajemos, bien sea desde nuestras casas, como en el momento actual, bien desde nuestras oficinas o desde el campo donde llevamos a cabo nuestros estudios.

Hoy, en uno de los momentos más críticos de los últimos tiempos, la orquesta no ha dejado de sonar, sino que está más afinada que nunca y suena como una equilibrada sinfonía mozartiana. La crisis del coronavirus nos ha obligado a mantener una gran disciplina y organización, así como una permanente comunicación con nuestros clientes y proveedores para que nuestros estudios geotécnicos, hidrológicos, de ingeniería y topográficos continúen teniendo la gran calidad y aporten el valor necesario a los proyectos fotovoltaicos en los que intervenimos.

GMS Internacional se fortaleció también en los años de mayor crisis económica porque supo moverse por las turbulentas aguas de la economía mundial. Porque supo ver el camino y dotarse de las personas y los equipos necesarios, precisos, para hacer aquello que mejor sabía hacer y con lo que más disfrutamos los miembros del equipo. Las oportunidades que se abren ahora son muchas: mayor consciencia para la transición verde, mayor capacidad de sacrificio colectivo, mayor alcance a nivel mundial a través de nuestras oficinas en España, México, Chile y nuestra presencia en proyectos clave a nivel mundial como la mayor planta solar del Middle East.

Los retos son asimismo múltiples: convertirnos en un actor global de mayor tamaño y prestigio en un escenario económico volátil, ampliar nuestros servicios a un mayor número de sectores en nuevos países en desarrollo, o crecer orgánicamente sin necesidad de acudir a los mercados tradicionales de crédito.

Muchos son los retos y muchas las oportunidades. Tras el coronavirus, hemos recogido el guante y aceptamos el reto de situarnos entre las empresas más grandes y más internacionalizadas de nuestro sector.

Y no me cabe ninguna duda: unidos lo conseguiremos!!